Lágrimas de una luna fría se escapan
de un corazón herido que a olvidado rezar;
manos que se cruzan para encontrarse y decir adiós.
Y aunque ya te has ido
no puedo ver más allá
que el recuerdo que renace
como luna llena en noches de frío.
Mis pasos se desvanecen
y mi voz se pierde en el silencio de tu olvido,
en el confuso respiro que me llena el alma
cuando estás cerca aunque no sea conmigo.
Aún así te sigo buscando en mi fe perdida,
en el pasado inquieto
que no me permite ver
más allá de ti.
miércoles, 25 de noviembre de 2009
Sigo Esperando
Sigo buscando tu olor al otro lado de mi cama
que se quedó gélida y vacía la noche que te perdí
en el umbral de un día que no he podido olvidar,
tu adiós se llevó la sonrisa de mi boca,
dejándome lleno del amor que no supe darte.
Te perdí bajo la locura silenciosa de mis palabras
que no salieron a tu encuentro
y el dolor pasivo de mi alma que engaña a mi corazón
con la promesa de tu regreso.
Hoy todavía te sigo esperando
y me pregunto con amargura que hubiera pasado
si en el momento de tu partida
me hubiera estrechado en tus brazos
diciéndote lo mucho que te amaba.
lunes, 23 de noviembre de 2009
El rincón de mi Alma
Si mi alma llegara a volar hasta ti,
encontraría tu camino y refugio´;
si mis manos tocaran tu cuerpo, volaría.
Si tan sólo se escuchara mi voz en tu mar,
como lo hace la tuya en mi desierto de amor
perdido, desolado y frío... Entenderías que te amo.
Te amo desde el rincón oculto de mi alma,
desde mi corazón abatido que se niega
a no tenerte, a perderte.
Los últimos vientos me han arrastrado hasta aquí,
ahora estoy solo, sintiéndome arena que va y viene
pero no encuentra su mar.
encontraría tu camino y refugio´;
si mis manos tocaran tu cuerpo, volaría.
Si tan sólo se escuchara mi voz en tu mar,
como lo hace la tuya en mi desierto de amor
perdido, desolado y frío... Entenderías que te amo.
Te amo desde el rincón oculto de mi alma,
desde mi corazón abatido que se niega
a no tenerte, a perderte.
Los últimos vientos me han arrastrado hasta aquí,
ahora estoy solo, sintiéndome arena que va y viene
pero no encuentra su mar.
Una Oración
Solo una oración pido por ella
por eso estoy aquí al borde del abismo
rezando por ella y mal diciendo mi fe
que no alcanzó para salvarla de mi infierno-
Ahora me mira con sus ojos huecos
y yo la veo bajar al fondo del dolor,
viene a salvarme con sus besos rotos por la herida
a perdonarme su muerte y también la mía,
Ya no quiero salir de este infierno,
para qué si ella tiene otro que le devolvió la vida,
yo solo me di cuenta de que era toda mi vida
cuando la maté
por eso estoy aquí al borde del abismo
rezando por ella y mal diciendo mi fe
que no alcanzó para salvarla de mi infierno-
Ahora me mira con sus ojos huecos
y yo la veo bajar al fondo del dolor,
viene a salvarme con sus besos rotos por la herida
a perdonarme su muerte y también la mía,
Ya no quiero salir de este infierno,
para qué si ella tiene otro que le devolvió la vida,
yo solo me di cuenta de que era toda mi vida
cuando la maté
Yo la Mate
Yo la maté y estoy encadenado a este infierno,
yo la maté y al hacerlo acabe con mi vida
la maté al decirle que no la quería,
que no sentía más amor por ella.
Hoy sin ella no soy nada y mi vida es un infierno
por eso estoy muerto en vida como ella desde que yo la maté
Yo la maté tembloroso ahogando mis palabras
impulsado por este demonio que me invade y se ríe de mí
Yo acabé con su vida cuando era sólo mía,
ahora nada tengo...
yo la maté y al hacerlo acabe con mi vida
la maté al decirle que no la quería,
que no sentía más amor por ella.
Hoy sin ella no soy nada y mi vida es un infierno
por eso estoy muerto en vida como ella desde que yo la maté
Yo la maté tembloroso ahogando mis palabras
impulsado por este demonio que me invade y se ríe de mí
Yo acabé con su vida cuando era sólo mía,
ahora nada tengo...
La extensión de la Herida
La extensión de tu desierto amarga mi boca
que sedienta sangra tu maldito amor.
la sequía de tu cuerpo dejó mis manos vacías,
que temblorosas huyen de la hambruna que mató mi alma.
palidece en la arena mi cara moribunda cuando de morir en la extensión de tu desierto huyo.
la aridez de tus besos fueron vinagre que bebí para no morir de sed,
honda herida me dejaste... fui el antílope en tu boca hambrienta,
la fuente que dejaste seca y con el tiempo tu desierto.
perdido me encuentro y desolado busco el motivo que te llevó
a elegirme a mí para matarme.
Herido de muerte me quedé
lo que duele no es la herida
es la vida que me sobra para odiarte.
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